COLAPSA CEMENTERIO GENERAL DE SUCRE

SUCRE, BOLIVIA (ANB / ABI).- El Cementerio General de Sucre, considerado uno de los más importantes de Bolivia, superó su capacidad de depósito de cadáveres, informó el martes la administradora general de este dieciochesco camposanto, Eva María Quevedo, a días de recibir a decenas de miles de deudos durante el Día de los Difuntos y de Todos los Santos, entre jueves y viernes venideros 1 y 2 de noviembre venidero.

    "Tenemos un promedio de 3 a 4 entierros  por día, entonces está rebasando la capacidad  de los pabellones, cuarteles, osarios (reducciones de nichos) y mausoleos institucionales y familiares", precisó.

    Este camposanto, construido en el año 1777 y modificado en el siglo XIX con un estilo neoclásico, cuenta con 23 pabellones, uno en construcción, cuatro cuarteles, 1.850 osarios y  177 mausoleos institucionales y familiares.

    Señaló que durante la gestión 2011 se registraron 6.410 de personas enterradas: hombres 2.682, mujeres 2.698, hombres menores de 12 años 182, mujeres menores de 12 años 156, recién nacidos varones 414, recién nacidos mujeres 278.

    "Tenemos 20 funcionarios de campo y 5 administrativos. Es poco personal para atender el cementerio general, necesitamos más recursos humanos, porque los trabajos son intensos y diarios. El cementerio general no puede abastecer la demanda de defunciones diarias, porque esa población crece a diario", sostuvo.

    Quevedo adelantó que recientemente se reunió con el sub alcalde municipal del Distrito 1, Édgar Gutiérrez, con quien solicitará al Ejecutivo nacional la construcción de un nuevo cementerio para la población.

    "El cementerio general no puede atender a la población sucrense y tendría que ver la posibilidad de la construcción de un nuevo cementerio general, porque el que tenemos ya no puede acoger a la población. Está muy colapsado", expresó.

   Finalmente, adelantó que la intención de su administración era inaugurar el honor crematorio para la festividad de Todos Santos, que desde dos gestiones atrás no puede ser utilizado por la falta de un tarifario que tiene que ser aprobado por el Concejo Municipal.

    El horno crematorio fue instalado con una inversión 1,5 millones de bolivianos de bolivianos, que incluye la infraestructura, la adquisición y las pruebas técnicas de funcionamiento, además de la calibración de la máquina incineradora, que fue realizada por especialistas argentinos.