LA NACIONALIZACIÓN DEFINITIVA: UNA PROMESA QUE SE CUMPLE

LA PAZ, BOLIVIA (ANB / ABI).- El 1 de mayo de 2006 el presidente Evo Morales afirmó que la tercera nacionalización de los hidrocarburos en la historia de Bolivia sería la definitiva, tras promulgar el decreto en Caraparí, donde se encuentra el principal campo petrolero: una promesa que, según los indicadores económicos y los resguardos legales para proteger los recursos naturales, entre ellos, los hidrocarburos, se cumple.

    El decreto 'Héroes del Chaco' otorgó al Estado el control absoluto de los importantes yacimientos de gas y petróleo del país y estableció que las empresas extranjeras que operan en Bolivia deben entregar toda su producción a la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) para su comercialización e industrialización.

    Esta tercera nacionalización incluye la refundación de YPFB, que había sido literalmente desmembrada en cuatro empresas privadas distintas: Andina, Chaco, Transredes y Empresa Boliviana de Refinación (EBR) en los procesos de capitalización y privatización impulsados por los gobiernos neoliberales

    Tras la nacionalización, YPFB controla toda la cadena productiva de los hidrocarburos: la exploración, explotación, transporte, refinación, almacenaje y comercialización de gas natural, petróleo y sus derivados, tanto en el mercado interno y externo, y se ha convertido en el pilar de la economía boliviana.

    'Hermanas y hermanos, en estos siete años de la revolución democrática cultural, empezamos a cambiar Bolivia. Saben que ha cambiado la economía nacional, hemos mejorado la economía nacional,  gracias a la lucha del pueblo boliviano, de todos los sectores sociales, especialmente del sector social,  indígena originario, por la nacionalización de los hidrocarburos. El 1 de mayo de 2006 hemos cumplido con ese mandato del pueblo boliviano que era nacionalizar los hidrocarburos', respaldó el Jefe de estado al celebrar en la Plaza Murillo los 7 años de la nacionalización.

    A su juicio, recuperar los recursos, los servicios básicos, permitió también recuperar la dignidad del pueblo boliviano y la Patria, tomando en cuenta que las políticas sociales, las políticas económicas, ahora no las define el Fondo Monetario Internacional y las políticas democráticas no las define la Embajada de Estados Unidos.

    Con sólo dos datos graficó el cambio profundo en la economía boliviana: una renta petrolera que llegará este año a 5.000 millones de dólares contra 300 millones que percibía el Estado antes de la nacionalización y el galopante crecimiento de las reservas internacionales de 1.700 millones de dólares a más de 14.000 millones de dólares, que le han permitido a Bolivia dejar de ser un 'Estado mendigo, un Estado limosnero' y convertirse en un estado digno y en proceso de liberación.

    Las dos anteriores nacionalizaciones de los hidrocarburos, en 1937 a la Estándar Oil, en el gobierno de David Toro y en 1969, a la Gulf Oil, en el gobierno de Alfredo Ovando Candia, se implementaron también con los objetivos de recuperar los hidrocarburos para los bolivianos, objetivos no alcanzados.

    El 13 de marzo de 1937, a través de una Resolución el gobierno de DavidToro, presidente de la Junta Militar de Gobierno, declara la caducidad de las concesiones petrolíferas de la Standard Oil Company Of Bolivia y la reversiónde todos los bienes al Estado, por defraudación comprobada de los intereses fiscales.

    El 17 de octubre de 1969, a través de otro  Decreto Supremo, el gobierno de Alfredo Ovando Candia, revirtió al dominio del Estado y entregó a YPFB todas las concesiones otorgadas a la empresa petrolera The Bolivian Gulf Oil Company (BOGOC) y se dispuso la nacionalización de los bienes e instalaciones de esa empresa petrolera.