COMUNARIOS DICEN QUE NO QUEMARON UNA CASA, SÓLO PALOS

Santa Ana de Pucarani

LA PAZ, BOLIVIA (ANB / Erbol).- Beatriz Bautista, habitante de la localidad Santa Ana del municipio de Pucarani, negó que los comunarios hayan quemado la vivienda de una persona con quien mantienen una disputa por derecho propietario, como lo informó el representante del Defensor del Pueblo en El Alto, José Luis Hidalgo.

“Estaban amontonados ladrillos, palos. Lo que se ha procedido a quemar son los palos, pero no había viviendas allí”, afirmó la mujer, en entrevista con la Red ERBOL.

Ayer, el representante de la Defensoría indicó que los familiares del señor Pedro Vega habían denunciado la quema de su casa. Hidalgo, en persona, no pudo verificar la queja porque, según él, un grupo enardecido de comunarios no permitió su paso, pero señaló que a la distancia pudo ver una humareda.

Asimismo, el funcionario afirmó que los familiares de Vega también tenían algunos de sus seres queridos retenidos en la población. La comunaria negó esta versión y aseveró que policías son testigos de lo que realmente ocurrió.    

Antecedentes

Bautista señaló que Pedro Vega asegura ser el dueño de 60 hectáreas de terreno en Santa Ana, sin embargo, la comunidad también reclama el derecho propietario colectivo de este terreno.  

Explicó que Santa Ana es un distrito indígena donde rige la justicia comunitaria. En ese marco, recordó que el Consejo de Justicia de la localidad emitió una sentencia, en agosto de 2013, en donde se reconoce el derecho de Vega a mantener sólo alrededor de cinco hectáreas.

La comunaria sostuvo que Vega tenía tiempo desde la emisión de la sentencia para buscar reconciliación y arrepentimiento. Sin embargo, el aludido logró que la comunidad se enardeciera más cuando sacó a la luz un informe en que se asegura que las 60 hectáreas son suyas de acuerdo a folio real avalado por la Alcaldía de Laja.

De forma paralela, Vega interpuso una Acción de Libertad contra la comunidad porque se sentía amenazado. Bautista aseguró que la justicia ordinaria falló en contra del denunciante. Luego, la misma persona instaló un Amparo Constitucional que también fue rechazado, según la mujer.

Las acciones de Pedro ocasionaron la furia de la comunidad que decidió expulsarlo de Santa Ana.