Alarma en el lago Titicaca
Por:
Edwin Conde Villarreal / Cronista del siglo 21.
Mariano Arratia es artesano desde hace 40 años y debido a la contaminación del lago Titicaca se siente perjudicado. |
LA PAZ,
BOLIVIA (ANB / Erbol).- Los artesanos de la isla Suriqui, expertos
constructores de grandes embarcaciones transoceánicas, confirmaron que la
totora del lago Titicaca, planta subacuática usada por generaciones como
materia prima, alimento y medicina en el sector lacustre, es dañada por la
contaminación ambiental; el tallo una vez afectado, es inutilizable.
El isleño Mariano Arratia (72),
artesano desde hace 40 años, explica que a causa de la contaminación de las
aguas –la polución se genera en El Alto, Laja y Viacha de donde salen miles de
litros de aguas residuales que llegan al espejo lacustre–, “ahora se realiza
una nueva selección de los tallos que serán usados como materia prima para la
elaboración de la artesanía”.
Arratia muestra un grupo de totoras
amarillas y otras oscurecidas por la contaminación, compara ambos y dice, “esta
planta negra ya no sirve, ni el ganado se la come, con ella tampoco se pueden
hacer balsas, ni otros objetos artesanales”. Ahora tenemos que navegar –asevera
el artesano– largos trechos para la pesca, que ha disminuido considerablemente,
también hay que buscar entre los totorales a la “planta sana”.
Suriqui, que se ubica en la región
lacustre de la provincia Los Andes del departamento de La Paz, junto a las
islas Pariti y Quehuaya, además de otros sectores del Titicaca, están siendo
contaminados, según la Liga de Defensa del Medio Ambiente (LIDEMA), por aguas
residuales domésticas, así como de mercados, hospitales y postas sanitarias, de
industrias, mataderos, operaciones mineras de Milluni y Viacha, y por el
lixiviado del botadero de basura de Villa Ingenio de El Alto.
A ello, se suman los residuos
sólidos que ingresan al recurso hídrico, el más alto del mundo y con más de
ocho mil kilómetros cuadrados de superficie compartidos con el Perú, al ser
arrastrados en la época de lluvias por varios ríos de El Alto como el Seque,
Seco y Pallina hasta el Katari, luego desembocan en la bahía Cohana del lago
menor o Huiñaymarka.
Por otra parte, uno de los
dirigentes del Cantón Suriqui, Leonardo Esteban (68), recuerda que en abril e
este año, apareció una mancha verde entre las aguas del Titicaca, ocasionando
la mortandad de una gran cantidad de aves, peces y anfibios en varios sectores
del Titicaca. “Las aguas verdes emanaban un mal olor, por eso apareció en el
sector de Sicuya en el lago una gran cantidad de peces muertos en la
superficie”, añadió.
También se registró la muerte de una
gran cantidad de especímenes de Telmatobius o “ranas gigantes” en la isla Pata
Patani con las aguas verdes, después en mayo la mortal masa acuática verduzca
se trasladó a la isla Cojata, mientras que en agosto se encontraba esparcida
entre las islas Suriqui y Taquire del
lago Titicaca.
Explicó que la totora ahora aparece
con un color diferente, casi negra, y que necesariamente debe ser quemada o
desechada ya que es inservible. “La contaminación deteriora los ecosistemas,
provoca la disminución de la pesca, la extinción de especies nativas de flora y
fauna, y afecta el desarrollo de los isleños. Dónde están las políticas
medioambientales del país”, cuestionó.
Por otra parte, en septiembre de
esta gestión, la ministra de Medio Ambiente y Agua, Alexandra Moreira, anunció
que su cartera está realizando trabajos para disminuir los niveles de
contaminación registradas en el lago Titicaca y como una acción inmediata –aún
no se precisó la fecha– anunció para ese fin la plantación de cercos de totora.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
ANBOLIVIA te invita a ser el quinto poder, opina...con respeto
DEJA TU OPINIÓN EN:
TW: @ANBOLIVIA
TW: @ANBdigital
F: https://www.facebook.com/anboliviadigital