Charaña
LA PAZ, BOLIVIA (ANB / Erbol).- El director de Alerta Temprana y Prevención de Riesgos de la
Gobernación de La Paz, Hilarión Callisaya, informó que el sobrepastoreo causó
la muerte de al menos 10 mil cabezas de ganado camélido por inanición, en el
municipio de Charaña de la provincia Pacajes del departamento de La Paz.
La autoridad
explicó que en los últimos años, los pobladores de esa región incrementaron la
producción camélida, debido a la comercialización de la carne y fibra de llamas
y alpacas a países como Chile y Perú.
Sin
dar cifras exactas dijo los comunarios aumentaron entre 100 y 200 camélidos a
su ganado de 400 y 600 cabezas. Criticó que ese factor no se considere en una
zona que carece de forraje para los animales a causa de la falta de lluvias.
“¿Una
llama cuánto cuesta? La gente ha empezado a criar más llamas, ha empezado a
aumentar la población de camélidos y una de las razones para que estos animales
estén muriendo es porque ha bajado el forraje (…) ha crecido (la producción
camélida) porque ahora tiene valor la carne de llama y también la lana, no se
pierde nada, antes era sólo consumo, ahora ya no es consumo, ahora es
comercial”, declaró Callisaya a la Agencia de Noticias Indígenas de Erbol.
Cultivo
de forraje
La
Gobernación paceña plantea el cultivo de forraje en esas regiones donde se
carece de lluvia, a través de un sistema hidropónico, que consiste en sembrar
cebada en bandejas y agua con nutrientes, dentro de un invernadero.
Hilarión
Callisaya reconoció tuvieron problemas para ayudar a los pobladores de Charaña
con alimento para sus animales porque en La Paz no se comercializa este
producto, por lo que tuvieron que comprar alfa alfa de Cochabamba y Sucre.
Dijo fue más costoso porque 28 toneladas
de forraje demandó una inversión de 700 mil bolivianos.
Contó
que ya se implementó cuatro invernaderos con este sistema en Callutaca de la
ciudad de El Alto. Explicó que en 10 metros cuadrados se obtuvo una tonelada de
cebada, luego de 20 días de ser cultivada.
“No
hubo necesidad de producir de esa manera, pero ahora nos está obligando (la
sequía) a experimentar. Nosotros como Gobernación hemos experimentado en
Callutaca, ya hemos cosechado, de 10 metros cuadrados hemos sacado una tonelada
de forraje. Pienso que en 200 metros cuadrados se sacará más”, afirmó.
Adaptación
al cambio climático
Las
gobernaciones de La Paz y Oruro trabajan en un Plan Estratégico de Adaptación
al Cambio Climático en las cuencas de los ríos Mauri y Desaguadero, para
resolver problemas que causa el cambio climático como la sequía en poblaciones
de esos lugares, informó el director de la Secretaria de los Derechos de la
Madre Tierra paceña, Carlos Taja.
El
plan consiste en elaborar perfiles de proyectos para hacer frente a la sequía
en al menos 20 municipios de La Paz, explicó Taja, como el manejo integral de
cuencas y la perforación de pozos, que básicamente sirva para producir forraje
para los ganados de la zona.
“Dentro
de estos proyectos estamos previendo el tema de elaborar perfiles a nivel de
cuencas, como es el manejo integral de una cuenca para el tema de vegetación,
viendo el tema de agua porque en realidad necesitamos pozos, que pueda hacer
que exista producción de ciertas especies, una de ellas es importante (como)
las especies forrajeras”, indicó Taja.
Dijo
20 municipios son vulnerables al cambio climático porque tienen poca vegetación
y no cuentan con agua. “Lugares como Calacoto (municipio) tienen poca
vegetación, tiene el peligro, el riesgo de que este lugar al tener menos
captación de agua, al no tener plantas, es vulnerable, pude ser afectado con
una sequía”, afirmó.
Productores
de camélidos
El
alcalde del municipio de Charaña, Vladimir Montes, reportó que este año el
10% del ganado camélido, entre llamas y
alpacas, murieron por la falta de alimento en esa región. Porcentaje
equivalente a 10 mil cabezas de ganado de 120 mil que existen en la zona.
Hilarión Callisaya coincidió con el burgomaestre e indicó que cuando llegaron a
las poblaciones contaron entre tres hasta 10 llamas muertas por falta de
alimento.
Pero
Montes responsabilizó a la sequía por este hecho y no a un sobrepastoreo por
una sobrepoblación del ganado. Dijo que la sequía redujo las praderas nativas.
“Las
llamas han muerto por el tema de sequía. Este año apenas ha llovido 20 días, lo
que ha repercutido en que nuestras praderas nativas no crezcan, eso ha
impactado en la muerte de nuestras llamas, no es por el sobrepastoreo como lo
llaman ellos, de ninguna manera”, aseveró el burgomaestre.
Dijo
que los aymaras siempre fueron productores de camélidos en ese sector porque la
tierra no produce nada. Contó que cada familia cuenta desde 80 a 1.000 cabezas
de ganado camélido. La carne, como la lana de estos animales son
comercializados cada domingo en la feria trinacional entre Perú, Chile y
Bolivia, en la zona tripartita de las tres naciones. Destacó que esta actividad
se realiza hace más de 50 años y es único en Suramérica.
Explicó
que la carne se vende a 18 bolivianos el kilo y la fibra varia de Bs18 a Bs22
la libra. Mientras que la llama cuesta Bs400 a Bs800. “Charaña siempre ha sido
productor de camélido, desde hace miles de años. Los aymaras convivimos entre
los municipios, las comunidades peruanas, chilenas y bolivianas, (que) nos
dedicamos a la crianza de camélidos”, remarcó.
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