Por Carmen Maldonado
LA PAZ, BOLIVIA (ANB / ABI).- Más de 4,2 millones de bolivianos entre madres, escolares y
adultos mayores se benefician anualmente con uno de los tres bonos sociales
instaurados en los últimos ocho años de la administración del presidente Evo
Morales.
Según datos del Ministerio de Economía y
Finanzas, los bonos Juana Azurduy de Padilla, Juancito Pinto y la Renta
Dignidad otorgan recursos económicos a 4.219.344 bolivianos de sectores
vulnerables que equivalen al 38,3% del total de la población.
El Bono Juana Azurduy de Padilla entre
febrero de 2008 y agosto de 2014 benefició a 1.201.481 madres e infantes
menores de dos años, lo que significa el 10,9% de los bolivianos.
Ese subsidio creado en la gestión Morales
consiste en el pago de 1.820 bolivianos, durante 33 meses, a las mujeres
gestantes y hasta dos años después del nacimiento del bebé.
El objetivo del bono es reducir la
desnutrición crónica y mortalidad infantil y la mortalidad materna, meta que se
cumplió en los seis años de la asistencia social.
De acuerdo con datos oficiales, la
desnutrición crónica infantil bajó al 16% y la mortalidad infantil descendió a
46 por cada un mil nacidos, además la mortalidad materna se redujo a 180 por
cada 100.000 nacidos, mientras que los partos institucionales subieron a
46.227.
Otra política de impacto social instituida
por el Gobierno es el Bono Juancito Pinto que benefició, desde 2006, a un total
de 12.729.704 estudiantes de primero a sexto de primaria y secundaria con la
entrega 200 bolivianos por año, recursos que provienen de la nacionalización de
las empresas estratégicas productivas del país.
Se prevé que este año, ese bono llegue a
2,3 millones de estudiantes en 14.900 unidades educativas fiscales de todo el
país, que representan el 17,7% de la población.
El propósito de ese subsidio de incentivo a
la permanencia escolar es reducir la deserción escolar que en 2006 se situó en
6% y en 2013 bajó a 1,7%.
"Hemos bajado más de cuatro puntos
porcentuales, eso significa que hemos reducido ampliamente la tasa de
deserción. Términos cualitativos se valora mucho más la necesidad de educarse y
hay más motivación", aseguró a la ABI el viceministro de Educación
Alternativa y Especial, Noel Aguirre.
Asimismo, la Renta Universal de Vejez o
Renta Dignidad benefició, desde mayo de 2009 a julio último, a 1.066.478
personas adultas mayores de 60 años, equivalentes al 9,7% de la población
boliviana.
La Renta Dignidad es un subsidio que paga
3.000 bolivianos cada año (que puede cobrarse de manera mensual o acumulable) a
las personas sin una renta o pensión del sistema de seguridad social, y 2.400
bolivianos a los que si son rentistas regulares
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