COCHABAMBA, BOLIVIA (ANB / ABI).- El Ministerio Público informó el viernes que después de un
trabajo de investigación realizado por los fiscales de Cochabamba y Tarija, se
lograron sentencias condenatorias por feminicidio en tres casos registrados en
2014.
"Tras la fundamentación de la
acusación realizada por el Ministerio Público, el Tribunal Quinto de Sentencia
de Cochabamba determinó el encarcelamiento de Juan Carlos Andia Amezaga, por el
delito de feminicidio en contra de Yérika Soley Gonzales Quiroga", explicó
la Fiscal de Materia, Jimena Narváez.
La operadora de justicia explicó que el
acusado fue sentenciado a 30 años de presidio sin derecho a indulto, que deberá
cumplir en el penal de El Abra.
Según el cuaderno de investigación, Andia, más conocido como "Charly",
mantenía una relación con Yérika a quien le quitó la vida porque ella descubrió
que él estaba casado.
"No conforme con haber perpetrado ese
hecho en el interior de su auto, la llevó a una zona alejada donde procedió a
quemar el cuerpo colocándolo debajo de unas llantas en desuso", señala la
investigación.
En el lugar, sólo se encontraron cenizas
del cuerpo y huesos humanos calcinados.
En otro caso, Johnny Choque Copa fue
condenado a 30 años de privación de libertad, también por feminicidio.
La sentencia fue asumida por el Tribunal II
de Sentencia de Cochabamba.
La Fiscal de Materia, Noemí Cossío, informó
que el sentenciado deberá cumplir su pena en el penal de El Abra en Cochabamba.
"Johnny Choque utilizó un cuchillo de
cocina para quitarle la vida a Nikita Rosario Villca Condori. La apuñaló en la
región del corazón y el hígado", informó.
Por otra parte, en Tarija, José Luis
Martínez Aguanta fue sentenciado a 30 años de cárcel sin derecho a indulto por
feminicidio perpetrado en contra de Zulma Miriam Basilio Colque.
Según la información proporcionada por la
comisión de fiscales, integrada por Aldo Corrillo y Cristina Baldiviezo, el
caso fue reportado el seis de septiembre de 2014.
Ese día, el ahora condenado a prisión,
invitó a su víctima a almorzar, pero sus planes eran otros.
Martínez Aguanta tenía una hija de cinco
años con la víctima, sin embargo, ya era concubino de otra mujer.
El Juzgado Segundo de Instrucción en lo
Penal de Tarija dictó sentencia condenatoria de 30 años de presidio sin derecho
a indulto que cumplirá en el penal de Morros Blancos.
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