LA PAZ, BOLIVIA (ANB / ABI).- La comerciante Jeannette Ramírez que ayer perdió
el bebé que gestaba por 10 semanas, tras el desalojo protagonizado por guardias
municipales de la Alcaldía de La Paz, denunció una 'violenta' golpiza de
funcionarios de la comuna.
Ramírez, de 18 años de edad,
desde una cama del Hospital de la Mujer, en
Miraflores, dijo, según un reporte de radio Patria Nueva, que es
huérfana y que con su trabajo en el puesto de venta mantiene a sus hermanos
menores.
'A eso de las tres de la mañana
(del martes) han venido, sin miedo nos han pateado, me han pateado de mi
estómago y me he caído, de ahí me han llevado en ambulancia al hospital, me han
dicho que he perdido al bebé, estaba de dos meses', relató.
Agregó que los gendarmes municipales
llegaron en tres volquetas cuando las vendedoras que se encontraban en vigilia
en el lugar estaban dormidas.
'Nos ha quitado las frutas,
nosotras éramos mujeres y no podíamos
defendernos, ellos eran hombres, entonces no podíamos hacer nada', sostuvo.
Aclaró que las vendedoras no
tenían armas blancas, como señalaron algunos funcionarios de la Alcaldía.
Por su parte, Adalberto Ramírez,
hermano de la víctima, pidió justicia.
'Yo pido justicia, las señoras
gremialistas jamás han agredido, eso es mentira', argumentó.
El director de Gobernabilidad,
Pedro Susz, manifestó ayer que los funcionarios municipales que participaron en
el operativo llegaron al lugar y se encontraron con mucha gente con palos,
piedras y armas blancas.
'En la trifulca puede haber ocurrido que
alguna de las vendedoras hubiera recibido un palazo de sus propios compañeros,
no hay ninguna evidencia de esta supuesta señora embarazada que habría perdido
su bebe', arguyó en conferencia de prensa.
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