Noveno
día de paro cívico
Miembros del Comité de
Movilizaciones en una de sus concentraciones frente a la Alcaldía. Foto: Radio
El Salar/Erbol.
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POTOSÍ,
BOLIVIA (ANB / Erbol).- En el noveno día del paro indefinido por la
construcción de una terminal de buses en
Uyuni, los pobladores empiezan a quejarse por la falta de alimentos y combustibles; mientras las empresas
operadoras de turismo paralizaron sus actividades al menos en un 70 por ciento,
reportó la radio El Salar de la Red Erbol.
Según la emisora local, estos
meses del año son la “temporada alta” para el turismo en Uyuni, porque El Salar
no está inundada como en la época de lluvias y el prolongado conflicto social
afecta ahora en gran medida a esta actividad económica.
“En un 30 a 40 por ciento no
más estamos funcionando, pero más que todo haciendo viajes cortos, porque no
hay gasolina, entonces con lo poco de gasolina que teníamos reservado pudimos
hacer estos días viajes cortos por un día por El Salar”, dijo uno de los guías
de turismo.
Rexy Colque, otro trabajador de
una agencia de turismo, agregó que por ahora están trabajando solamente con los
turistas que lograron llegar a Uyuni a través del transporte aéreo.
“Nos estamos abasteciendo con
los que llegan vía avión, están llegando algunos sólo desde Potosí y La Paz,
porque los buses no pueden ingresar con normalidad, entonces las agencias
solamente estamos de eso”, afirmó Colque.
GLP y pan
Las amas de casa también sufren
el efecto del paro indefinido porque los panaderos no tienen gas para elaborar
el pan.
“No hay gas y tampoco hay pan
por falta de gas”, dijo Valeria Guarachi, una de las panificadoras de esta
población, quien aseguró que cada día elaborada 3000 unidades de este alimento.
“Nos encontramos escasos de
combustible, por eso no estamos haciendo el pan, el bloqueo ya es más de una
semana y eso totalmente nos está afectando, ya no hay ni qué comer, algunas
personas debemos al banco y tampoco podemos cumplir con (esas obligaciones)”,
enfatizó.
Verduras
Las verduras también empezaron
a escasear en los mercados de Uyuni y lo poco que aun se puede encontrar en los
centros de abasto se vende a precios elevados.
“No están queriendo vender así
no más, (mínimo) por cinco bolivianos están vendiendo, todo está muy caro, la
cuartilla de la cebolla está 20 bolivianos”, dijo una vecina. “Todo ya falta,
aba, arveja, el mercado está desabastecido”, ratificó una comerciante de
verduras. Otro vendedor señaló: “Los amarros verdes de cebolla ya nada
tenemos, tomate también está empezando a
escasear, (al igual que la) zanahoria, en este momento sólo hay papa”.
Pasajes
Hasta ayer, se denunció que por
los tramos alternos hacia la ciudad de Potosí, algunas vagonetas cobraron entre
200 a 250 bolivianos por persona; hoy se informó que esas vías también están
bloqueadas.
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