LA PAZ, BOLIVIA (ANB / Erbol).- El Director de la Fundación Tierra, Gonzalo
Colque, denunció presiones por parte del Gobierno hacia las organizaciones que
trabajan al interior del Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure
(TIPNIS), estas acciones llegarían al grado de posibles bloqueos a sus fuentes
de financiamiento.
Los criterios vertidos por el funcionario indican que varias autoridades
expresaron públicamente la necesidad de investigar el proceder de los recursos
que permiten el funcionamiento de estas instituciones, incluso algunas ya
fueron sometidas a pormenorizadas inspecciones.
“Existe una presión, es evidente porque todos los ciudadanos nos damos
cuenta de que diferentes autoridades han expresado diversas opiniones de juzgar
a estas instituciones que están apoyando a este movimiento indígena (...) Han
recibido visitas e inspecciones”, detalló Colque.
Cabe señalar que ya desde la pasada gestión existió amedrentamiento por
parte de los legisladores del Movimiento Al Socialismo (MAS) en contra de todas
las organizaciones que apoyaron a la VIII marcha indígena, al grado de crearse
una Comisión Especial de Investigación con la finalidad de fiscalizar el trabajo
de las Organizaciones No Gubernamentales (ONG´s).
Respecto al proceso de “post consulta”, que arranco ayer, el especialista
en temas medio ambientales criticó el accionar del Estado por llevar adelante
un proceso que no es validado por parte de las comunidades que habitan al
interior del TIPNIS. “Este hecho, que debería ser un hito histórico, comenzó
mal”, señaló.
Entre las organizaciones cuestionadas por el gobierno se encuentran el
Centro de Estudios Jurídicos e Investigación Social (CEJIS), el Foro Boliviano
sobre Medio Ambiente (Fobomade) y a la Liga de Defensa del Medio Ambiente
(Lidema), además de la Fundación Tierra, instancias que fueron acusadas de
desestabilizar al Gobierno y de dañar la imagen del presidente Evo Morales.
Estrategia de división
La estrategia de dividir a los indígenas de tierras bajas del oriente
boliviano comenzó después de que la Asamblea Legislativa Plurinacional aprobara
la Ley 222 que promueve la consulta a solicitud del CONISUR (Consejo Indígena
del Sur), aliado del gobierno.
Oromomo, uno de los dos lugares donde inició la “consulta post”, fue la
primera comunidad del TIPNIS que visitó en marzo Evo Morales llevando regalos y
promesas de mejorar las condiciones de vida de sus habitantes. Tras esa visita
se conformó una dirección paralela en la Subcentral de Sécure a la cabeza de
Carlos Fabricano, quien fue elegido por un sector de comunidades de ese lado
del parque, desconociendo así a Emilio Noza como presidente de esa
organización.
Días después algo similar ocurrió en la Central de Pueblos Étnicos del Beni
(CPMB), cuyas bases desconocieron a Pedro Vare por transar con el gobierno un
acuerdo programático sin consultar a los pueblos a los que representa y en su
lugar eligieron a Nazaret Flores, quien rechaza la consulta post y está a favor
de que la carretera no pase por la mitad del TIPNIS.
A estos dos casos se suma lo ocurrido en la Central de Pueblos Indígenas de
La Paz (CPILAP) y la Central de Pueblos Nativos Guarayos (COPNAG), en ambas sus
dirigentes fueron desconocidos por sus bases debido a que firmaron acuerdos con
el gobierno para no participar de la IX marcha.
La campaña mediática del gobierno se incrementó a partir de marzo de este
año, misma que sirvió para desacreditar a los dirigentes indígenas que
lideraron las dos últimas marchas en defensa del TIPNIS y para mostrar los
supuestos beneficios que iba a representar a las comunidades la carretera por
en medio de la reserva ecológica.
Hubo también publicaciones, como el folleto “Atrapados en el Paraíso”, que
afirma que en el TIPNIS hay sólo un bachiller, que los niños mueren con
picaduras de serpientes y que los indígenas viven en la pobreza a falta de una
carretera.
A esto se suma los regalos que llevó Morales y sus ministros a varias
comunidades del TIPNIS, como motores fuera de borda, generadores de
electricidad, material escolar, material deportivo, carnetización, antenas
parabólicas, entre otros.
También hubo sobrevuelos del presidente Evo Morales junto a periodistas
para tratar de convencer que la única alternativa para el tramo dos de la
cuestionada carretera Villa Tunari – San Ignacio de Moxos era partiendo el
Isiboro Sécure en dos, porque a su juicio la alternativa de cambiar la ruta por
un lado del parque era inviable debido a la existencia de muchos ríos.
La Paz, 29 julio 2012 - J.A.P./
lo cierto es que los indigenas estan divididos.. y solo la consulta develara el deseo de aceptar o no la carretera.. lastima que que haya gente que desea acallar la voz de las bases indigenas del Tipnis
ResponderEliminar