Dirigente de la Confederación de Fabriles de Bolivia
LA PAZ, BOLIVIA (ANB / Erbol).- El dirigente de la Confederación de Fabriles de Bolivia, Víctor Quispe Ticona, manifestó hoy que el llamado proceso de cambio enarbolado por el gobierno del presidente Evo Morales no favorece a su sector, y que en más de seis años de gestión sólo beneficio a una naciente oligarquía y a los empresarios.
“El proceso de cambio desde 2006 hasta 2012 habría creado para nosotros una nueva oligarquía, una nueva forma de gente que se está empezado a embosillar (los recursos del país) a título de proceso de cambio”, sostuvo el dirigente fabril en declaraciones a Erbol.
Apuntó que la situación de los trabajadores, en particular los fabriles, no ha cambiado; continúan percibiendo salarios insuficientes y precarios, donde el incremento salarial ni si quiera repone el poder adquisitivo perdido.
“Siempre lo hemos dicho, estos no son incrementos salariales, son reposiciones a la inflación de la canasta familiar, pero ni eso se repone. Seguimos con salarios de hambre, que no reflejan la realidad; mientras que los empresarios han acumulado mayor riqueza, nosotros tenemos que sabernos jugar la vida en el día a día”, manifestó Quispe.
Los datos económicos muestran que los sectores mineros, cocaleros y comerciantes son los que más se beneficiaron económicamente en el país. A nivel empresarial, el sistema financiero, exportador y constructor fue el más desarrollado.
“Los empresarios privados en los últimos años han crecido en exportaciones, en ventas, han creado más fábricas a nivel nacional, pero el salario del trabajador no sube”, replicó el dirigente.
Por ello señaló: “Cuando escuchamos a los empresarios decir que un 8 por ciento va a ocasionar el despido de los trabajadores, no les creemos, siempre lo han dicho, siempre han amenazado con eso, por eso es que los trabajadores fabriles no estamos de acuerdo con este incremento salarial y menos con el mínimo nacional”.
La víspera el gobierno nacional acordó con la Central Obrera Boliviana (COB) un incremento de 8 por ciento al salario básico y 20 por ciento para el salario mínimo nacional.
Un estudio realizado por los trabajadores fabriles establece que el promedio salarial a nivel nacional, en ese sector, es de 1.700 bolivianos. La cantidad de trabajadores fabriles se aproxima a los 300 mil, donde muchas empresas son informales y no cumplen con los beneficios de ley.
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