Por Coco Cuba
SANTA CRUZ, BOLIVIA (ANB / ABI).- El IV Foro de Países Exportadores de Gas (FPEG) llegaba a
su final el viernes con una cosecha, para el anfitrión, Bolivia, que involucra
contratos de exploración por más de 1.500 millones de dólares, la adición de
Rusia como el mayor socio para la industria gasífera local y la necesidad de
montar tecnología para producir, a gran escala, Gas Natural Licuado (GLN) en
aras de la expansión del comercio boliviano más allá de la región.
También confirmó el rumbo, ya abierto, de
la generación de energías alternativas, virtú de su diversidad fisiográfica,
desde Los Andes en el oeste hasta el Escudo Brasileño (este).
Bolivia cerraba el Foro de Santa Cruz
luego de haber promovido la incorporación del gigante ruso Grazprom en toda la
cadena de producción de gas, desde la explotación, la exploración, transporte,
comercialización, producción y dotación
de tecnología.
A través de la estatal Yacimientos
Petrolíferos Fiscales Boliviano (YPFB), el país se aprestaba, movida por los
acuerdos alcanzados en el marco del Foro, a cambiar de mero productor y
suministrador a distribuidor y comercializador in situ en los países que
consumen su gas y derivados.
YPFB suscribió compromisos de inversión en
exploración por al menos 1.582 millones de dólares con las petroleras Shell
(angloholandesa), Repsol (España), PAE (Argentina), Petrobras (Brasil) y las
subsidiarias de la estatal hidrocarburífera Chaco y Andina.
Instituciones motor de la economía
advirtieron, por otra parte, que Bolivia, segundo productor de gas natural de
Sudamérica, debe mudar al mundo del GLN, es decir a comprimir y congelar el gas
que produce su región sudoriental para ampliar el espectro de su comercio a los
mercados de ultramar.
Quince años después de abortar un proyecto
privado para enviar gas en metaleras por puertos de Chile a México y Estados
Unidos, Bolivia se proponía instrumentar tal política pero desde el Estado.
"Nosotros exportamos a Argentina y
Brasil y ahora, ampliando a otros países, el gran deseo que tenemos es como el
GNL exportar a otros continentes", afirmó el presidente Evo Morales en la
localidad de Ascensión de Guarayos.
"Estos días estamos con un evento
internacional en la ciudad de Santa Cruz con los países exportadores de gas,
grandes y pequeños, y felizmente esos países nos toman en cuenta, países
grandes como Qatar, Emiratos Árabes, Rusia", sustentó.
La transferencia al GLN era sopesada mientras
el mundo escuchaba ya de la existencia del Gas Esquisto, de impronta
estadounidense, lo que impactaría, con alta probabilidad, en la cotización
internacional, tanto como ahora que el gas marcha indexado al precio del crudo,
a la baja hace 3 años con leves recuperaciones.
En la actualidad el valor del gas boliviano
responde al costo del petróleo de Texas WTI, que desde 2015 da tumbos en el
mercado internacional.
Morales consideró tal proyección debido al
potencial de al menos 60 trillones de pies cúbicos de gas natural (TCF) que
tiene el país andino amazónico.
El salto al GLN recibió el impulso del
privado Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), cuyo gerente, Gary
Rodríguez, consideró que el país tiene grandes posibilidades de encontrar
nuevos mercados de ultramar si apuesta de manera más agresiva por esta
producción.
"Muy buena la posibilidad de que
Bolivia entre al campo del GNL, eso nos permitiría como país tener acceso a
mercados de ultramar y no estar dependiendo solo del mercado brasilero o
argentino, que a momentos disminuyen la cantidad de compra", señaló en
declaraciones a la ABI.
A su juicio, la apertura de nuevos mercados
permitirá al país dejar la dependencia que tiene con los mercados de Brasil y
Argentina, cuyas demandas de gas natural son fluctuantes dependiendo de la
estación del año.
El vicepresidente Álvaro García Linera
había pedido al Ministerio de Hidrocarburos incorporar a mediano plazo el GNL
al portafolio de oferta energética del país para cruzar el Pacífico y llegar a
Asia, donde está "el epicentro de esa economía capitalista planetaria que
va a dominar en este nuevo siglo".
La Cámara Boliviana de Hidrocarburos y
Energía (CBHE) se se formó también en el coro de voces que cantan elegías para
que el país se embarque en la empresa que implica el concurso de barcos
metaleros y terminales y plantas especializadas en los puertos de descargue.
"Hay que pensar que la mayoría de los
contratos se firman a larguísimo plazo, hay que poder vislumbrar cuál va a ser
el desarrollo del mercado en ese tiempo", dijo la presidente de la CBHE,
Claudia Cronembold.
El valor del gas boliviano enfrenta las
fluctuaciones del precio del petróleo en el mercado internacional por un exceso
de suministros y la mayor producción de Gas de Esquisto y de GNL.
El GNL es el gas natural en estado líquido,
en un proceso que reduce su volumen 600 veces para su transporte en cisternas
especiales hasta poblaciones de difícil acceso geográfico o en barcos para
cruzar ultramar.
Bolivia contiene la segunda reserva
probada de Sudamérica, de casi 11 Trillones de Pies Cúbicos.
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