LA
PAZ Y NUEVA YORK (ANB / ABI).- El embajador de
Bolivia ante las Organización de Naciones Unidas (ONU), Sacha Llorenti, envió
el lunes una carta al secretario General de esa organización internacional, Ban
Ki Moon, en la que denuncia la detención de los tres soldados bolivianos en
Chile, mientras realizaban un operativo de lucha contra el contrabando,
informaron fuentes oficiales.
'Me dirijo a su autoridad, para poner en conocimiento y denunciar que el
pasado 25 de enero los conscriptos del Ejército de Bolivia, Alex Choque,
Augusto Cárdenas y José Luis Fernández fueron detenidos por autoridades
chilenas mientras realizaban un operativo de lucha contra el contrabando de
vehículos indocumentados, en la zona fronteriza con Chile', reseña la nota, la
misma que fue difundida por la Cancillería boliviana.
Los conscriptos Claudio Álex Choque Quispe (20 años), Augusto Cárdenas
García (19) y José Luis Fernández Choque (18) fueron capturados por carabineros
de Chile en la línea fronteriza, el 25 de enero, cuando custodiaban un vehículo
indocumentado que pretendía ser introducido a Bolivia.
Llorenti denunció, en la carta, que Chile vulneró acuerdos
internacionales y bilaterales con la detención de los tres soldados, tales como
la Carta de las Naciones Unidas.
En la misiva, también se establece que los detenidos no tuvieron una
comunicación inmediata y expedita con el Consulado boliviano, con lo que se fue
en contra de la Convención de Viena sobre Relaciones Consulares.
Bolivia demandó ante ese organismo la libertad de los detenidos y pidió
a la comunidad internacional prestar atención al curso del caso.
Asimismo, explicó que el delito por el que son acusados los tres
conscriptos, de porte ilegal de armas de fuego e ingreso ilegal al país, 'no
aplica a militares, pues su ámbito se limita a particulares (civiles)'.
Finalmente, la carta señala que 'vanos fueron las gestiones para la
liberación de los efectivos militares debido a que las autoridades chilenas
dispusieron la detención preventiva de los militares bolivianos que portaban un
fusil como parte de su labor rutinaria en la lucha contra el contrabando,
demostrando un gesto inamistoso, un acto de mala vecindad y una decisión
desproporcionada'.
Los tres soldados bolivianos se encuentran detenidos en la cárcel de
Alto Hospicio, a 1.800 Km. Santiago de Chile, a la espera de la audiencia que
definirá su situación el próximo 25 de febrero.
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