PANDO, BOLIVIA (ANB / Erbol).- El Ministro de Defensa, Rubén Saavedra, informó a Erbol
que aún se esperan los resultados de un sumario instruido al interior de las
Fuerzas Armadas, para determinar las responsabilidades de la muerte de dos
efectivos del ejército, que el 19 de noviembre pasado, trataron de impedir que
las aguas de un río se lleven la vagoneta de un capitán en la ciudad de Sucre.
Un cadete y un conscripto del Liceo “Teniente Edmundo
Andrade” fueron arrastrados por el agua que descendía a través de la quebrada
de Quirpinchaca, después de que una fuerte lluvia acrecentó el caudal al punto
de derribar un puente. La vagoneta, que pertenece a un capitán de ese cuartel,
cayó a la corriente y quedó flotando en ella durante varios minutos.
Los fallecidos fueron Luis Estir y Alán Álvarez, el
primero cadete de segundo año, y el segundo recluta de la Brigada 67 de la
Fuerza Aérea. Los cadáveres fueron encontrados 16 kilómetros más abajo, cerca
de Yotala. El hecho sucedió horas después de que el Presidente Evo Morales hizo
entrega del coliseo de la institución.
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