MUJER ACUSA A FELCV DE ENCUBRIR A POLICÍA GOLPEADOR

La trataban de agresora y a él de "hermanito"

COBIJA/PERLA DEL ACRE

PANDO,BOLIVIA (ANB / Erbol).- La Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (Felcv) no le dio importancia a un caso de tentativa de feminicidio en la ciudad de Cobija, porque el involucrado pertenece a la Policía de Pando. Con voz temblorosa, en medio de llanto y con secuelas en su rostro por la brutal agresión, la víctima reveló que la mayoría de los policías despreciaron su denuncia y salieron en defensa del agresor.

En contacto con Perla del Acre, la señora con iniciales M.S. de 38 años, madre de cinco hijos (11, 9, 6, 4 y 2 años) relató la pesadilla que le tocó vivir en abril de la presente gestión, por la despiadada golpiza que le propinó su concubino W.L., de profesión policía, quién con su arma de fuego y con un cuchillo intentó acabar con su vida. No conforme con ello, sufrió malos tratos en la principal institución encargada de defender los derechos de las mujeres, porque la mayoría de los funcionarios salieron en defensa de su camarada.

La humilde mujer que se dedica al comercio de golosinas y algunos objetos –en afueras de las escuelas de Cobija- relató que las agresiones físicas y psicológicas en su contra eran constantes, por distintas causas–teniendo como testigos a sus hijos que sentían algo normal las discusiones y las peleas en casa. A mediados de la gestión 2015 su marido se cambió de destino a la población de Puerto Rico y retornó a inicios de la actual gestión. Después de convivir un mes con relativa calma, otra vez, volvieron las discusiones y peleas.

--Perla del Acre (P.A.) ¿Si tu pareja te agredía constantemente, cuantas veces lo denunciaste en la Felcv?

---M.S.: “Cuatro veces. Hace más de cinco años lo denuncié, cuando era la Brigada de Protección a la Familia, en ese entonces me hicieron conciliación, me convencieron para que siga viviendo con él, incluso dijeron que lo estaban arrestando por ocho horas, pero no pasó más de dos horas ya estaba en la casa para agredirme. Si en la policía le han soltado entonces no tenía a donde más acudir, me decía que nada podían hacer contra él porque eran sus camaradas y entre ellos se protegen”.

--P.A. ¿Cuándo fue la última agresión que sufriste?

---M.S.: “Un día lunes del mes de abril (2017), los comerciantes salimos a una marcha, todos estaban obligados a participar, si no asistías era multa. Les di de comer a mis hijos y se fueron a la escuela, yo a la marcha, a medio día volví y serví almuerzo, luego me fui a la reunión en la sede de los gremiales (kilómetro 5).En la sede nos encerraron con llave hasta definir varios asuntos, la reunión terminó cerca a las 8 de la noche, cuando traté de entrar a la casa mi esposo no me dejó, le expliqué, le rogué para que permita entrar y él dijo que me vaya, decía que yo me había ido con otro y otras cosas más…era muy noche, toqué la puerta más fuerte, entonces salió a golpearme y me dejó afuera”.

--P.A.: ¿Fuiste a denunciar a la Felcv?

---M.S.: “Después que me golpeó decidí ir a la Felcv, me atendieron dos policías y fuimos hasta la casa, cuando toqué la puerta mi marido me gritó con insultos y los policías fueron testigos, hasta que le hablaron de su apellido, le pidieron que me permita entrar, pero él no quiso, después de largo rato le dije que me permita sacar a mis hijos, tampoco quiso, estaba bien agresivo, hasta que al último decidió irse él, me pidió dinero para su alojamiento, le di 80 bolivianos con mucho dolor porque esa plata era para la comida de mis hijos y se fue en su moto... Los policías me dijeron que podía estar tranquila, pero les pedí protección porque presentía que iba a volver… a mucha insistencia la investigadora me dio su número de celular para que le llame por cualquier emergencia”.

--P.A.: ¿Volvió tu esposo?

---M.S.: “Tenía mucho miedo, le fui a rogar a mi vecina (de la tercera edad) para que me acompañe esa noche y ella accedió, no pasó ni una hora y volvió. Tocó la puerta con mucha fuerza, me dijo que abra, yo muy asustada le marque a la policía, entró la llamada, pero no me contestó, llamé al 110 y no me contestaban, hasta que en una patada sacó la puerta y comenzó a golpearme… La señora de la tercera edad trataba de apaciguarle, pero el papá de mis hijas me trató de todo, de un jalón me llevó a otro cuarto, me arrastró y me alzo del cuello, intentó ahorcarme, me dijo que me iba a matar y la señora intentaba calmarle…después de un buen rato nos dormimos”.

--P.A.: ¿Al día siguiente todo volvió a la calma?

---M.S.: “Al día siguiente (martes) no me dejó ir a la venta, pero cuando se fue a su trabajo decidí ir a la fiscalía, porque la policía investigadora me iba a esperar, cuando nos encontramos le conté lo que había pasado en la noche y ella me dijo que su celular estaba mal, pero que mi esposo no me había hecho casi nada… Entramos a la fiscalía, la psicóloga y una doctora me preguntaron todo y les dije lo que pasó. Los fiscales le preguntaron a la investigadora ¿Por qué no había emitido una orden de aprehensión para el agresor?, y ella dijo que en ese momento lo haría”.

--P.A.: ¿La policía C. emitió la orden de aprehensión?

---M.S.: “Salimos afuera y le pregunte a la policía C. que más seguía, y me dice -sabe señora pero no le está viniendo a pegar ni nada, que macana, mañana es mi descanso y mejor pasado mañana hablamos, voy a estar de servicio y ahí me va decir que cosas más le está haciendo, o me llama a mi celular voy a estar atenta- le pedí protección y ella dijo que no me pasaría nada, pero yo tenía mucho miedo, me fui desmoralizada, llorando por esa injusticia y con miedo que mi marido me vuelva a golpear… Ese día martes pasó como si nada, al día siguiente quiso matarme”.

--P.A.: ¿Te volvió a golpear?

---M.S.: “Miércoles en la noche, él me dijo ¿bonito te has quejado no ve? ahora me vas a conocer- sacó un arma de su maleta y lo cargó, también agarró un cuchillo grande tipo machete (…) yo estaba muy asustada. Mis hijas lloraban, gritaron, de rodillas le imploraban para que no me mate y no me golpee más, pero él no estaba en sí, parecía enloquecido, nos decía cállense mierd… De un empujón me arrinconó en el catre, me apretó con su pierna, puso el arma sobre mi pecho y el cuchillo trataba de acercar a mi cara, mientras yo me defendía, le agarré su mano para alejar el cuchillo y como tanto me defendía me dio un puñete en la nariz, sentí un fuerte golpe en los ojos que me hizo ver estrellas y me bajó harta sangre”.

--P.A.: ¿Cómo llega la policía a tu casa?

---M.S.: “Mi hija de 11 años salió gritando a la calle, le avisó a una vecina que mandó a su nieto a la Felcv y gracias a Dios llegó un teniente en su moto, entró como podía a la casa con su arma y con gas. Al darse cuenta que llegó la policía, mi esposo lo escondió su arma y me dijo de mi nombre M. dile que no ha pasado nada, te voy a perdonar todo lo que me has hecho, yo le miré y le dije ya, como me había dado esa libertad para moverme, me levanté y salí como loca hasta donde el teniente. Estaba toda ensangrentada, no podía respirar bien, porque mi nariz estaba chueco por el golpe”.

--P.A.: ¿Qué hizo la policía con el agresor?

---M.S.: “El teniente le ordenó que salga del cuarto y le reclamó porque estaba ensangrentada, él salió molesto, le dijo no pasa nada solamente fue un sopapo ¿tanto lío por eso?, pero yo le conté todo lo que había pasado. Mi hija de nueve años le dijo que me quiso matar, ella había visto donde escondió las cosas con las que me quería matar y le entregó al teniente… Minutos después llegó un carro patrullero, pensé que con más policías iba estar más protegida, que me iban a defender mejor, pero ocurrió lo contrario”.

--P.A.: ¿Por qué lo contrario, cual fue la reacción de los policías?

---M.S.: “Entró un sargento, me miró como despreciándome, dijo ¿cuál es el problema? -mira haber hasta yo peleo con mi mujer, tanta huevada por esto- dijo así con esa palabra… y al agresor le preguntó -¿hermanito qué ha pasado, estás mal, por qué no vas a la Caja?- y el papá de mis hijos se hizo al enfermo… El sargento llamó a dos policías y les dijo -alcáncenle al hermanito miren está enfermo, llévenlo hasta el auto y háganle sentar, hay que llevarlo a la caja… pucha hermanito por qué no te cuidas-, le dijo el sargento mientras yo botaba sangre, toda golpeada, me miraba con desprecio”.

--P.A.: ¿No te trataron como víctima de una brutal agresión?

---M.S.: “El teniente era el único que me defendía, para los demás lo que me había pasado era muy poca cosa, el sargento en un tono molesto me dice -señora avance, avance, ni modo vaya al patrullero- A mi agresor lo llevaron de brazos, lo alzaron hasta el patrullero, le trataron de hermanito y a mí como si fuese la agresora. Dentro el patrullero se han puesto a charlar, el sargento le pregunta al padre de mis hijos ¿hermanito tienes dos armas? ¿Qué calibre es? y le responde con números-tengo mi sargento-, ¿Porque no me lo vendes uno? Ahorita te lo doy 3.100 bolivianos, -no mi sargento es para mi ascenso- le responde, ellos charlaron hasta llegar a la Felcv y yo calladita”.

--P.A. ¿No te preguntaron nada?

---M.S.: “No me preguntaron porque me estaba saliendo sangre, porque estaba con la cara hinchada, con la nariz chueca, ni nada, yo lloraba por dentro y estaba con mucho miedo porque la mayoría de los policías estaban a su favor, me sentí humillada por la policía, porque se supone que tienen que proteger a la víctima. Llegamos a la Felcv, ahí habían varios policías hombres, vino un suboficial que estaba con polera negra, preguntóqué había pasado, tampoco le dio importancia, es más preguntó si no había manera de arreglar internamente, -arreglen aquí nomás- dijo, yo no respondí nada”.

--P.A. ¿Entonces, quién te defendió?

---M.S.: “Apareció una señora sargento, mayorcita, ella puso un alto a la burla de los policías varones, me pidió que entrara a una oficina, me sacaron fotos y me llamó la atención porque no había denunciado más antes, le respondí que había denunciado pero la policía que investiga el caso no me dijo nada... La sargento estaba muy molesta porque la investigadora no había hecho bien su informe… le llamó la atención a mi marido y él se hizo al enfermo. Estaba hasta las 03.00 de la mañana, pero no me tomaron declaración, porque la policía que atiende mi caso no estaba de turno. Después retornamos a la casa”.

--P.A. ¿Tu esposo quedó detenido?

---M.S.: “Mi esposo se quedó en la Felcv, le dijeron que si estaba enfermo se iría a la Caja Nacional de Salud y si estaba bien sería arrestado y parece que se lo llevaron a la caja. Como a la 1 de la tarde del día jueves, el hombre llegó sano a mi casa, empezó a buscar todas las cosas importantes porque se había alquilado un cuarto. Se llevó hasta los papeles de la casa y cuando no quise que lleve los papeles un policía me dice tengo que darle todo lo que es de él, sin importar la situación de mis hijos, sólo me opuse darle el ropero y la tele, después se llevó todas las cosas de valor. A la policía C. le pregunté ¿ahora le van a dejar libre? y me contestó -sí señora no se puede hacer nada más-“.

--P.A.: ¿A qué instituciones más acudiste?

---M.S.: “Fui a la Defensoría de la Niñez a sentar denuncia sobre los maltratos que sufrieron mis hijos en varias ocasiones y me pidieron el certificado de nacimiento original, yo tengo cuatro certificados y uno está mal, no quisieron recibir, los cinco o nada…-pero a mis hijos su papá me los maltrata- le dije, ¿Hay sangre, están heridos? me preguntó una secretaria, le respondí no, -entonces no puede ser abuso físico, le voy a poner abuso psicológico- me responde. Muy dolida le pregunté ¿entonces tiene que estar así como yo toda pegada con moretes para que les crean a mis hijos? -sí que lamentable, pero así son las leyes señora- me dijo una secretaria, la puedo reconocer”.

--P.A.: ¿Cómo lo detienen a tu esposo?

---M.S. “Un lunes, el fiscal le había tomado su declaración y lo ha detenido porque parece que se alteró, al día siguiente me dicen que tengo que ir a una audiencia y tenía que buscarme un abogado… Estaba completamente perdida, no sabía cómo era la audiencia, ni tenía dinero para contratar a un abogado, al final me fui solita a la audiencia, mientras el agresor llegó con toda una tropa de policías, la investigadora que atiende mi caso me miró y no me dijo nada. En la audiencia de medida cautelar le dieron detención domiciliaria, decían que me iba a dar pensiones para mis hijos, pero hasta ahora nada. Una doctorita (abogada) no podía creer lo que me había pasado, dijo que la investigadora hubiera evitado todo lo que me pasó, porque días antes ya tenía una denuncia de agresión y tenían motivos para detenerlo, pero no lo hicieron... ni cuando intentó matarme la policía no lo ha detenido, fue la fiscalía que decidió detenerlo”.

--P.A.: ¿Cómo estas ahora?

---M.S.: “Muy traumada, tengo mucho miedo, a veces no puedo ni dormir porque tengo pesadilla, siento que aún me quiere matar, a cada lugar que voy estoy con mucho miedo, porque el papá de mis hijas es vengativo… con qué dinero voy a contratar un abogado si apenas gano para la comida de mis hijos y para cubrir luz y agua. El papá de mis hijos no me da asistencia para mantener a mis hijos y yo debo trabajar en lo que pueda, muchas veces salía a la calle a vender con todo mi morete, para que a mis hijos no les falte la comida, ni sus útiles en la escuela…”, concluyó temblorosa la víctima que sufrió varias agresiones.