CANCILLER: HAY QUE REVALORIZAR LA ALASITA COMO UNA CULTURA DE LA REDISTRIBUCIÓN

LA PAZ, BOLIVIA (ANB / ABI).- El canciller David Choquehuanca instó el domingo a no mercantilizar la celebración de la Alasita sino a revalorizarla como una cultura de la redistribución y un espacio de encuentro social, complementariedad y armonía.

    Al mediodía del 24 de enero de cada año, en las principales ciudades de Bolivia miles de personas adquieren diversos bienes y otros artículos en miniaturas que simbolizan los deseos de prosperidad y bienestar.

    "No precisamente Alasita, sino la cultura de la redistribución", dijo Choquehuanca y explicó que el Ekeko personifica a la abundancia desde hace miles de años.

    La autoridad de origen aimara recordó que a fines de 2014, Bolivia recuperó del Museo Nacional de Berna, Suiza, la 'Illa del Ekeko', un ídolo esculpido en roca entre el año 200 antes de Cristo y 200 después de Cristo, y que es parte de la cultura preincaica Pucara.

    "Nosotros somos parte de la cultura Pucara nosotros y estamos en proceso de recuperar de lo que somos, la cultura Pucara es la cultura de la redistribución", explicó en una entrevista con la radio Erbol.

    El Ekeko es venerado principalmente en la región andina de Bolivia cada 24 de enero para pedir por la multiplicación de los bienes.

    Choquehuanca lamentó que la Alasita se haya mercantilizado y que sea vista simplemente como un negocio que aflora en esta fecha en calles, plazas y atrios de iglesias.

    "El Ekeko sale de la Isla del Sol el 21 de diciembre, en el solsticio de verano, y viene distribuyendo abundancia, amor, armonía, esperanza, felicidad", aseveró.

    Ese ícono y las ceremonias ancestrales para celebrar la Alasita no sólo están en la región del altiplano, añadió, sino que esa tradición boliviana ahora se la practica en varios países de la región y Europa.

    "Tenemos que empezar a recuperar nuestra autoestima, proteger nuestra cultura", remarcó el jefe de la diplomacia boliviana.