MONTAÑO: DENUNCIAS DE QUINTANA CONTRA ZAPATA NO CONTRADICEN RESULTADOS DE INVESTIGACIÓN LEGISLATIVA

LA PAZ, BOLIVIA (ANB / ABI).- Las denuncias que hizo el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, en contra de Gabriela Zapata y la existencia de una organización criminal, no contradicen la investigación que realizó la Asamblea Legislativa Plurinacional sobre los contratos entre el Estado y la empresa china CAMC, y que descartó absolutamente un tráfico de influencias por parte del presidente Evo Morales, afirmó el viernes la presidenta de la Cámara de Diputados, Gabriela Montaño.

    La legisladora se refirió de esa manera a las versiones de la oposición en sentido de que las últimas revelaciones que hizo el ministro Quintana contra Zapata, Cristina Choque y otros, contradicen las conclusiones de la investigación de la comisión legislativa.

    "Nuestro objeto de investigación fueron los contratos entre CAMC y el Estado, y verificar si ahí existió tráfico de influencias por parte del presidente Evo Morales. Nosotros descartamos absolutamente el tráfico de influencias por parte de nuestro Presidente, lo que no descarta que la señora Zapata, la señora Choque, y no sabemos quiénes más, hayan tenido actividades delictivas, desarrolladas inclusive en oficinas de Gestión Social", afirmó.

    Montaño aclaró que la referencia que hizo Quintana sobre la probabilidad de la existencia de alguna irregularidad, no involucra al contrato que se hizo con la empresa CAMC para la construcción del tramo I de la vía férrea Montero-Bulo Bulo, sino a una sociedad accidental, aspecto que no le correspondió investigar a la Comisión.

    "Gabriela Zapata está en un proceso penal por enriquecimiento ilícito y ahora Juan Ramón Quintana ha demostrado que hay mayores elementos para pensar en que ella utilizó la oficina de la Unidad de Gestión Social para efectuar hechos ilícitos. Lo más grave es que se haya utilizado esa oficina para negociar, gestionar contratos, enriquecerse de manera ilícita y dañar el interés del Estado", concluyó.