YPFB: NACIONALIZACIÓN DE HIDROCARBUROS GENERA $US 19.340 MILLONES DE RENTA PETROLERA

LA PAZ, BOLIVIA (ANB / ABI).- El proceso de nacionalización de los hidrocarburos, iniciado hace más de siete años por mandato del presidente Evo Morales, generó para el país 19.340 millones de dólares por concepto de renta petrolera, informaron el miércoles fuentes oficiales.

    'La nacionalización de los hidrocarburos generó un total de 19.340 millones de dólares, hecho histórico obtenido por la comercialización de hidrocarburos entre 2006 y el primer semestre de 2013, el cual es un resultado de la sumatoria de los ingresos generados por el Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), Regalías y Participaciones de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Patentes y otros impuestos nacionales derivados de la actividad económica', se informa en un comunicado institucional.

    El documento recuerda que la demanda del pueblo boliviano de recuperar la soberanía nacional a través de la Agenda de Octubre del 2003, abrió un nuevo horizonte en el manejo de los recursos naturales y ahora el país se beneficia con este resultado.

    En ese marco, el comunicado destaca que con la Renta Petrolera obtenida en todo el proceso de la Nacionalización se superó en aproximadamente doce veces a las ganancias obtenidas en la etapa neoliberal.

    'El aumento en las recaudaciones tributarias y otras participaciones del sector de hidrocarburos obedece a una eficiente administración del patrimonio boliviano, al incremento de la demanda de volúmenes de gas natural de Argentina y Brasil, al ajuste trimestral de precios de exportación del energético que se elevaron en función a la cotización del crudo internacional de referencia y a las nuevas reglas establecidas por la Nacionalización', indica el documento.

    Asimismo, recuerdan que durante la etapa neoliberal, con la vigencia de la antigua Ley de Hidrocarburos que avaló la capitalización y privatización de la industria petrolera, los ingresos para el Estado apenas alcanzaron a 1.660 millones de dólares, garantizando para el sector privado transnacional una mayor participación dentro de un esquema que le otorgaba la propiedad sobre los recursos naturales.