EN BOLIVIA HAY 850 MIL NIÑO, NIÑAS Y ADOLESCENTES QUE TRABAJAN EN SITUACIÓN DE EXPLOTACIÓN

En los minibuses trabajan los niños y niñas de voceadores.

EL ALTO, BOLIVIA (ANBOLIVIA).- Khithitix irptaskaraki Erradicación Progresiva del Trabajo Infantil aka Ministerio de Trabajo tuqita sawayiw Bolivia markpachanxa utjiw kimsaqallqu pataka wawanaka sinti irnaqayata, ukatwa tayk awkinakarux mayipxi sum uywapxañapataki. 

 

La Especialista de Erradicación Progresiva del Trabajo Infantil dependiente del Ministerio de Trabajo, Mabel Durán, ha informado el viernes que en el país se cuantificó 850 mil niños, niñas y adolescentes que trabajan en situación de explotación, cuando su derecho es ser protegidos del trabajo infantil. El próximo 12 de junio se recuerda el ‘Día Mundial Contra el Trabajo Infantil’.

Durán Prieto, en declaraciones a la Agencia de Noticias de Bolivia (ANBOLIVIA) explicó que en Bolivia, 850 mil niños, niñas y adolescentes bolivianos trabajar en diferentes actividades; la cifra corresponde al 28 por ciento de la población de entre 5 y 17 años. Más del 87 por ciento está inmersa en trabajo infantil peligroso, que pone en riesgo su salud, su integridad y su formación, y los expone al maltrato físico, psicológico y moral.

“Hay que hacer notar a los padres y madres la responsabilidad que tienen con sus hijos e hijas y adolescentes para que antes reciba Educación, Salud y una familia. Entendemos que muchos niños y adolescentes trabajan por la falta de empleo de sus padres y sabemos que es una temática que tenemos que aportar como Estado, pero no hay que desmerecer que los padres tienen que tener responsabilidad”, manifestó Durán.

Según Durán el trabajo infantil en el país está asociado con actividades productivas que resultan nocivas para el desarrollo tanto físico como mental de los niños, niñas y adolescentes, y que les privan de su infancia o adolescencia, de su potencial y su dignidad.

La situación del trabajo infantil en Bolivia

Como Estado miembro de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en 1997 Bolivia ratificó el Convenio 138 sobre la edad mínima y dispuso que está sea de 14 años. El 2002 se ratificó también el Convenio 182, mediante Ley Nº 2428, y así se comprometió a adoptar las medidas necesarias para eliminar las peores formas de trabajo infantil con carácter de urgencia.

El Ministerio de Trabajo junto a la empresa privada, los trabajadores, la sociedad civil y niños, niñas y adolescentes trabajadores determinaron 23 formas de trabajo infantil peligroso: 11 según su naturaleza como la zafra, la limpieza de hospitales, recolección de basuras, la minería y otras, y 12 según su condición como peón en labores agrícolas, trabajo forestal, modelo de ropas que implique sobreerotización de la imagen, operador de amplificación de sonido y otras.

Algunas vulneraciones de los derechos de los niños y niñas que trabajan

Según Durán en Bolivia 850 mil  niños, niñas y adolescentes de entre 5 y 17 años trabajan. Aclaró que el trabajo infantil pone en riesgo la integridad física y psicológica, y su derecho a gozar de salud.

746 mil niños, niñas realizan labores peligrosas, a pesar de su derecho es ser protegidos de todas las formas de explotación.

22.270 niños y niñas dedican su tiempo exclusivamente a trabajar y realizar labores domésticas, pero su derecho es estudiar.

258.940 niños y niñas que trabajan, son atendidos sólo por uno de sus padres y su derecho es ser protegidos por su padre y su madre.

Los niños y niñas reciben un salario de 300 a 400 bolivianos y los adolescentes perciben un máximo de 700 bolivianos.

200 mil niños y niñas distribuyen su tiempo entre trabajar, realizar labores domésticas y estudiar, y se vulnera su derecho a descansar y jugar.

30 mil niños y niñas y adolescentes realizan trabajo nocturno, a pesar de que tienen derecho al respeto y el buen trato.

¿Por qué trabajan los niños, niñas y adolescentes en Bolivia?

A criterio de Durán la pobreza hace que muchos hogares deban ocupar toda la mano de obra familiar, además otros factores como la migración, la irresponsabilidad paterna y a descomposición familiar, llevan a los niños y niñas a trabajar para sustituir a sus padres ausentes.

Las crisis socioeconómicas en los hogares también aumentan las probabilidades de que los niños, niñas y adolescentes opten por trabajar.

Frente a ello, Durán manifestó que a la cabeza del Ministerio de Trabajo y Previsión Social junto a una veintena de instituciones y organizaciones forman parte de la comisión interinstitucional, cuyo objetivo es avanzar en la erradicación progresiva  del trabajo infantil. “Entendiendo que esto se logrará resolviendo aspectos estructurales de la pobreza en el país”. La comisión está integrada también por el Ministerio de Educación que, desde su equipo de Género y Generacional y Justicia Social, ha incorporado la temática entre sus prioridades.

El Alto, 8 junio de 2012 – E.CH.M.