Especialista de Erradicación, Mabel Durán (ANBOLIVIA). |
EL ALTO, BOLIVIA (ANBOLIVIA).-Ministerio de Trabajo uksankirinkaxa qallantawayapxiw
luraña mä ‘Campaña de Sensibilización’ sutinchata, ukhamata jan utjañapataki sinti
wawanakax irnaqayata jan pago de salarios ukhamaraki jisk´achayata ukax chhaxqt´añapatakixa.
La Especialista de Erradicación Progresiva del
Trabajo Infantil dependiente del Ministerio de Trabajo, Mabel Durán, ha lanzado
el martes la masiva campaña de sensibilización contra el trabajo infantil
forzoso para que la sociedad y principalmente a los padres y madres de familia apoyen
su reducción.
Durán, en declaraciones a la Agencia de Noticias
de Bolivia (ANBOLIVIA), explicó que recientemente se identificó 23 formas de
trabajo infantil peligrosos, entre ellas 11 según su naturaleza y 12 según su
condición, además se cuantificó en el país a 850 mil niños, niñas y
adolescentes que trabajan en situación de explotación.
La autoridad gubernamental manifestó que su despacho viene realizando
acciones directas conjuntamente con los ministerios de Educación y
Comunicación, además de municipios a través de las Defensorías de la Niñez y
Adolescencia (DNA) para contribuir a que menos niños, niñas y adolescentes
estén realizando este tipo de actividades, porque están siendo vulnerados en
sus derechos fundamentales como la Educación, la Salud y la Recreación.
“Una de esas acciones es la campaña de sensibilización que vamos empezando el
12 de junio para comprometernos desde cada instancia a realizar las acciones
necesarias”, precisó Durán.
Durán manifestó en el oriente boliviano se viene
implementando el triple sello para que las empresas estén libres de trabajo
infantil y forzoso. Reiteró que se
elabora una normativa para regular, sancionar y fiscalizar estás 23 formas de
trabajo infantil peligrosas.
Por su parte, la coordinadora del Centro de Promoción de la Mujer Gregoria
Apaza, Maria Esther Ibáñez, manifestó que la mayor parte de los niños, las
niñas y los adolescentes trabajadores de El Alto estudian en establecimientos
educativos diurnos y un menor porcentaje en unidades educativas nocturnas.
“Quizá se deba al hecho de que El Alto es una ciudad productiva donde las
actividades económicas están en todo espacio, desde el taller de la familia, el
puesto de comercio y otras”, indicó Ibáñez.
A criterio de Ibáñez estás formas de trabajo infantil peligrosos promueven
la deserción escolar y afectan la salud como el recojo de basuras, la
carpintería, la metalmecánica, entre otros.
La coordinadora consideró que la implementación de programas de formación,
capacitación y concienciación a los padres y madres de familia permitirá que se
reduzca el trabajo infantil para que los progenitores asuman la responsabilidad
de sostener a sus hijos e hijas y no viceversa.
La situación del trabajo infantil en
Bolivia
Durán explicó que como Estado miembro de la Organización Internacional del
Trabajo (OIT), en 1997 Bolivia ratificó el Convenio 138 sobre la edad mínima y
dispuso que está sea de 14 años. El 2002 se ratificó también el Convenio 182,
mediante Ley Nº 2428, y así se comprometió a adoptar las medidas necesarias
para eliminar las peores formas de trabajo infantil con carácter de urgencia.
El Ministerio de Trabajo junto a la empresa privada, los trabajadores, la
sociedad civil y niños, niñas y adolescentes trabajadores determinaron 23
formas de trabajo infantil peligroso: 11 según su naturaleza como la zafra, la
limpieza de hospitales, recolección de basuras, la minería y otras, y 12 según
su condición como peón en labores agrícolas, trabajo forestal, modelo de ropas
que implique sobreerotización de la imagen, operador de amplificación de sonido
y otras.
¿Por qué trabajan los niños, niñas y
adolescentes en Bolivia?
A criterio de Durán la pobreza hace que muchos hogares deban ocupar toda la
mano de obra familiar, además otros factores como la migración, la
irresponsabilidad paterna y a descomposición familiar, llevan a los niños y
niñas a trabajar para sustituir a sus padres ausentes.
Las crisis socioeconómicas en los hogares también aumentan las
probabilidades de que los niños, niñas y adolescentes opten por trabajar.
Frente a ello, Durán manifestó que a la cabeza del Ministerio de Trabajo y
Previsión Social junto a una veintena de instituciones y organizaciones forman
parte de la comisión interinstitucional, cuyo objetivo es avanzar en la
erradicación progresiva del trabajo
infantil. “Entendiendo que esto se logrará resolviendo aspectos estructurales
de la pobreza en el país”, apuntó Durán. La comisión está integrada también por
el Ministerio de Educación que, desde su equipo de Género y Generacional y
Justicia Social, ha incorporado la temática entre sus prioridades.
El Alto, 12 junio de 2012 – E.CH.M.
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