DELINCUENTES OPERAN MÍNIMO EN GRUPOS DE CUATRO EN TRES SECTORES DE LA PAZ

LA PAZ, BOLIVIA (ANBOLIVIA / Erbol).- Comerciantes denunciaron que los antisociales operan mínimo en grupos de cuatro en tres populosos sectores de la zona 14 de Septiembre de la ciudad de La Paz. Garita de Lima, Huyustus y la avenida Buenos Aires son los sitios donde a diario se registran una serie de hechos delictivos frente a la vista de los centenares de vendedores. 

De acuerdo a los relatos recogidos por la Red Erbol, los mismos comerciantes de estos sectores aseguraron que se sienten  impotentes al ver los diversos mecanismos que usan los delincuentes para cometer delitos, especialmente, entre en horas de la noche y a tempranas horas del día, cuando generalmente la presencia policial es nula.

“Casi siempre rodean entre todos a la persona que identificaron para robar, luego uno de ellos escupe o echa algo en la cara (de la víctima), usan hasta polvos para echarles en el ojo, luego  mientras se está limpiando distraída, empiezan a hurgar sus bolsillos o la cartera”, explicó una de las vendedoras de prendas de vestir.

Otro vendedor de accesorios para celulares corroboró que a diario son testigos de los hechos delictivos cometidos por estos antisociales, quienes utilizan una serie de técnicas para distraer a sus víctimas.

 También señaló que los comerciantes cuando piden ayuda o alertan sobre estos robos son atemorizados por los delincuentes ante la falta de presencia policial, por lo que demandan patrullaje constante de efectivos.

Ambas personas coincidieron en afirmar que de poco o  nada sirven los módulos policiales de Apumalla, Max Paredes y otros sectores, donde los efectivos permanecen en su interior sin auxiliar a las víctimas o finalmente brillan por su ausencia.

“Los policías que vengan a caminar por lo menos, no pueden estar dentro de sus módulos sentados no más”, dijo la comerciante.

Un tercer vendedor añadió “Es bien peligroso estas zonas, hay aquí cerca un módulo, pero está vació o cuando alguna ves vienen los policías se quedan adentro de esas casetas, no están dando vueltas en la calle”. “Esos maleantes que siempre están con aretes y otras cosas en el cuello, roban y se escapan, no hay nadie que los atrape, porque los policías casi nunca se los ve”, sostuvo por su parte un comerciante ambulante, que vende pastas dentales.

Jaime, quien viste un uniforme negro de seguridad privada, apuntó que también son víctimas de constantes amenazas e incluso de acciones de venganza cometidos por  los delincuentes que operan en el sector aparentemente con el aval de los policías.

“En la esquina Garcilazo, hicieron un seguimiento a uno de  mis compañeros y lo han apuñalaron,  él ya no trabajó más desde esa vez, lo que pasa es que cuando agarramos a los antisociales para entregar a policías, estos los dejan libres y entonces se vengan de nosotros”, dijo.